martes, 2 de febrero de 2010

SENDERISMO POR LOS QUEJIGALES. RONDA

DOMINGO 31 DE ENERO

La jornada se caracterizó por la presencia abundante de nieve durante todo el recorrido, por lo que tuvimos la oportunidad de disfrutar de unas imágenes impresionantes.

Salimos desde el Área Recreativa de los Quejigales. Ya se veía el Torrecillas cargado de nieve.





Subimos por la Cañada del Cuerno hasta los Quejigos del Puerto de los Pilones.

En la Cañada del Cuerno existe la concentración más amplia de pinsapos de la Sierra de las Nieves.



El pinsapo (Abies pinsapo, Boiss) es un abeto exclusivo de las Serranías de Ronda y de Grazalema que está catalogado en peligro de extinción. El origen de estos pinsapares se remonta a las épocas frías acaecidas en el Cuaternario, durante las cuales la cuenca del Mediterráneo estaba rodeada de un bosque continuo de abetos primitivos. A medida que el clima se hacía más benigno, los abetos se relegaron a las cumbres más altas, quedando aislados unos de otros y evolucionando separadamente de distinta forma, dando lugar a las especies actuales de Abies. Alrededor del Mediterráneo viven nueve especies de abetos.




Los pinsapares se encuentran a altitudes que oscilan entre los 1.000 y 1.800 m aproximadamente. Todas las zonas en las que se encuentran se caracterizan por presentar precipitaciones elevadas, asentándose preferentemente en las laderas más umbrías de exposición norte.




Llegando al Puerto de los Pilones. El viento y la niebla dificultaban el caminar.


Matorral almohadillado en Puerto de los Pilones

Tras pasar el Puerto de los Pilones, aparece el disperso quejigal de alta montaña, con ejemplares centenarios, así como pies aislados de arce, tejo y mostajo. Los juegos entre el sol, la niebla y la nieve sobre los quejigos nos regaló instantáneas como las siguientes:





Una parada para comer y recuperar la energía perdida.



El día despejó en este tramo del recorrido, por lo que pudimos ver el mar e incluso el peñón de Gibraltar.



Por encima de 1.600 metros domina el matorral espinoso almohadillado, con especies como agracejo, piorno, sabina rastrera y enebro.
La falda del Torrecilla está cubierta por sabinas rastreras entre los pies de los quejigos.

Sabinar rastrero de Juniperus sabina

Pico del Torrecilla con sabinar rastrero

La primera parte del recorrido, hasta alcanzar la Cañada del Cuerno, se caracteriza por ser un terreno arcilloso impermeable, apareciendo posteriormente dolomías metamorfizadas del triásico superior, con aspecto tableado en algunos núcleos y en general mal estratificados. La segunda parte, desde Puerto de los Pilones hasta Torrecilla, está formada por calizas y margas metamorfizadas en las que abundan dolinas, torcales y simas.

Uno de los fenómenos más característicos del relieve calizo de la Sierra de las Nieves es el paisaje kárstico. En este tipo de sistemas, el agua superficial se filtra a través de las fisuras de la roca caliza agrandándolas hasta llegar a crear gargantas, simas, cuevas.

Pasamos junto a una sima de nombrado prestigio, la Sima GESM (Grupo de Exploraciones Subterráneas y Marina), junto a la Torca del Pirata. Es la tercera más profunda del planeta que ha atraído desde su descubrimiento gran número de expediciones espeleológicas de varias nacionalidades, habiéndose llegado hasta la fecha a la cota 1.098m del abismo.

Entrada de la sima GESM

Finalmente regresaremos por los Neveros de los Pilones al Área Recreativa de los Quejigales.

Fotos: Itziar López.

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